En Yucatán, baño que tiene como finalidad relajar y eliminar los "contaminantes" del cuerpo.
El curandero cubre inicialmente todo el cuerpo del paciente con miel silvestre, después vierte sidra, cerveza y agua tibia en la que previamente ha hervido hierbas y pétalos de flores rojas. Acompaña su tratamiento con rezos y solicita al paciente tallarse con jabón. A su término, se recogen todos los sobrantes y materiales utilizados que son arrojados a la basura.
Según Grinberg-Zylberbaum, su peculiar denominación se debe al hecho de mantener las mismas características que las empleadas por los antiguos mayas (1).
(1) Grinberg-Zylberbaum, J., 1987.