Al parecer, se trata del estado larvario de un escarabajo que al morder secreta una sustancia llamada cantaridina, que produce vejigas en la piel (2).
Para disminuir el intenso dolor que produce este gusano venenoso, en Coacotla, Veracruz, los afectados mascan las hojas del capulincillo cimarrón (?),(1).
(1) Gerónimo Mateos, J., 1979.(2) Castillo, L., 1993.