Sinónimo: escaldadura. Lengua Indígena: Otomi (Pue) zati, tieso (1). Totonaco (Pue) kachkakaguana, se escaldó, se rozó (2).

Enfermedad propia de los lactantes, reconocida por la irritación de la piel en nalgas y piernas, que en algunas partes del país es conocida como chincual.

En Puebla, los otomies de San Pablito y los totonacos de Zapotitlán consideran que se origina por mantener al niño durante largo tiempo con el pañal mojado (1 y 2) o por no bañarlo diariamente, especialmente cuando es "gordo" (2). Los primeros creen que el frío generado por la humedad de los pañales provoca esta irritación; mientras que los segundos la atribuyen a que el "orín caliente, quema".

El niño presenta llanto e inquietud, así como enrojecimiento de su "colita", la que toma apariencia de herida o llaga a punto de sangrar (2).

Para su tratamiento se recomienda untarle al niño almidón o tomate de cáscara (Physalis sp.) en la zona afectada (3). Los chontales de Tabasco le aplican después del baño el cocimiento frío de altamisa (Ambrosia artemisiifolia) (4); y los totonacos poblanos de Zapotitlán, aconsejan darle baños con las hojas de palo blanco (Sapindus saponaria) (2). El aseo diario, así como el cambio frecuente del pañal, son condiciones necesarias para que el infante se restablezca (1).

Para la medicina académica, este tipo de rozadura que se conoce como dermatitis del pañal, es común en las regiones genitales glúteas y vecinas de los lactantes. En ocasiones se presenta sólo con eritema intenso; en otras, con pápulas erosionadas, vesículas, fisuras y escamas. Suelen producirse lesiones aisladas, formadas por pápulas erosionadas y algunas pústulas. El origen de esta dermatitis es la maceración y la agresión del amoníaco de la orina. Por otro lado, la alcalinización de estas regiones, de por sí alcalinas, permite el desarrollo de gérmenes con los que el cuadro se complica más. Los médicos aconsejan acidificar el medio con ácidos débiles como el bórico, el acético o el láctico, dando al infante un baño de asiento con agua, a la que se agregan estos ácidos o vinagre blanco. También señalan la necesidad de cambiar el pañal inmediatamente después que el niño orine o defeque, evitando el uso de jabones, pomadas y calzón de hule (5).

Índice de Autores

(1) Castro Ramírez, A. E., 1988b.

(2) Cuerno Clavel, L. E. et al., 1989.

(3) Javis S., M., 1985.

(4) Delgado Lara, A. G., 1983.

(5) Saúl, A., 1974.

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