Mixe, sangrado de la punta de la lengua.

En Oaxaca, los mixes celebran un ritual para reparar los actos de mal comportamiento, que se consideran origen de enfermedades e infortunios. Es el curandero quien determina la necesidad de practicarlo y debe ser llevado a cabo por todo el grupo familiar de la persona que ha infringido las leyes sociales establecidas.

Consiste en hacer un corte en la punta de la lengua con la hoja del té limón, nej k (Cymbopogon citratus), gramínea de bordes muy filosos. Los ancianos mixes consideran que el dolor físico y el sangrado reparan los errores cometidos, y así se ofrenda a la tierra para lograr el perdón y conseguir buena salud y fortuna. Este ritual también es llevado a cabo cuando alguien fallece, para evitar que la enfermedad del difunto regrese y cause la muerte de otras personas (1).

Este rito tiene su origen en la época prehispánica, y es interesante hacer notar que se ha conservado hasta nuestros días sin modificaciones sustanciales. López Austin refiere que entre las "mortificaciones" que llevaban a cabo los nahuas, se encontraba la punción para provocar dolor físico y obtener sangre, líquido divino, usado como ofrenda a los dioses. Con esto se conseguía la "expiación dé los pecados", así como "fortalecer moral y físicamente al individuo", sobre todo cuando se encontraba en la adolescencia y en los primeros años de la juventud. Al respecto, el Códice florentino asienta:

Y por esto harás salir (varas a través de tu lengua): no sólo por hacer merecimientos, sino por arrojar el polvo, la basura (esto es, por purificarte de tus pecados). Ensangrentarás las varas, romperás la parte baja de tu lengua, por enfrente las meterás... Así perderás tus pecados, tus malas acciones, tus faltas... (2:439).

En la actualidad, esta ceremonia comienza a ser sustituida por el pago de limosnas, sobre todo entre las personas adineradas (1).

Índice de Autores

(1) Reyes Gómez, L., 1978.

(2) López Austin, A., 1990a.

MZ