Entre los mayas yucatecos de Dzitas, se nombra así al mal de ojo originado por aquellos individuos que desde su nacimiento tienen una "mirada dañina" (V. mirada fuerte); o por aquellos que la han adquirido al vivir determinadas situaciones, como excitación sexual, ira, sed, etcétera. Se considera que este daño es ocasionado en forma involuntaria; es reconocido principalmente por la presencia de diarrea.
Para su tratamiento, el agresor toma en sus brazos a la víctima o coloca cerca de ella una de sus prendas de vestir; también puede tallar el cuerpo del enfermo con tabaco (Nicotiana sp.) que ha sido previamente masticado (1).
(1) Redfield, R. et al., 1940.