Desviación del coxis. En Santa Ana Tlacotenco, Distrito Federal, es una enfermedad de calidad fría que padecen los niños que comienzan a caminar o los adultos que sufren una caída. Se manifiesta por intensa diarrea de color verde, dolor y falta de apetito (V. frío-calor)

Requiere ser tratada por terapeutas especializados. Para la diarrea y la calentura preparan cataplasmas con diferentes plantas remojadas en vinagre, mismas que no deben ser obsequiadas, sino compradas o colectadas. Las cataplasmas son colocadas sobre la espalda y el abdomen del paciente, con lo que se logra que le baje la temperatura y el excremento vuelva a su coloración normal. Posteriormente, hacen una limpia al enfermo utilizando huevo de gallina y piedras curativas; al terminar, acostado el paciente boca abajo, lo soban con Mentholatum o Vick VapoRub y a continuación le pellizcan y jalan la piel de la región afectada para acomodarle "la colita". También le untan la región de la columna -"espinazo y colita"- con alcohol y sebo de carnero derretido, e introducen un dedo por el ano del enfermo: el meñique si es niño, y el medio si es adulto, y proceden a jalar "la colita", sobando mientras tanto con la otra mano dicha región. Para realizar esta maniobra, el terapeuta ha envuelto su dedo en un pedazo de lana limpia de borrego, previamente engrasado con el sebo antes indicado. Es una curación que solamente realizan una vez, pues es muy dolorosa.

En cualquiera de los dos procedimientos mencionados, el paciente debe guardar reposo absoluto y no comer alimentos fríos; al sanar deberá darse un baño de temazcal (1).

Al parecer, se trata del padecimiento que la medicina académica reconoce como desviación o fractura del coxis, motivado frecuentemente por caídas en posición sentada. Se indica el reposo en las primeras fases y la movilización después; en raras ocasiones es necesaria la intervención quirúrgica (2).

Índice de Autores

(1) Palacios de Westendarp, P., 1986.

(2) American College of Surgeons, 1979.

MZ