También intuertos. Sinónimo(s): recaída (1 y 2).
Se conoce popularmente así al conjunto de dolores y malestares que suelen sufrir las mujeres después del parto.
La principal causa reconocida como precursora de los entuertos es no respetar las indicaciones establecidas para la cuarentena, es decir, levantarse y realizar quehaceres domésticos; también se atribuye a la falta de higiene durante y después del parto.
Los purépechas de Caltzontzin, Michoacán, mencionan, además, que puede deberse al aire, a la debilidad y a la naturaleza de la mujer (3); según las parteras adiestradas de Morelos, se trata de una "intoxicación" que sufre la mujer (1).
Los síntomas reportados son dolor de espalda y cintura, punzadas en la cabeza (3), desgano, fiebre (1), hinchazón del cuerpo, escalofríos, hinchazón y endurecimiento de los pechos (2), "partimiento de huesos" (2) (4), y "fríos en la cabeza" (4).
Las parteras morelenses hacen sudar a la mujer en forma copiosa con el fin de expulsar la sustancia que "intoxica" y provoca la enfermedad. La terapia consiste en frotar todo el cuerpo, especialmente las articulaciones, con el jugo caliente de diversas plantas medicinales combinadas con mezcal y orín de niño. Este tratamiento se repite durante tres días, después de lo cual la paciente debe tomar un baño en el temazcal (1).
De una forma similar, informantes de la comunidad morelense de Hueyapan, mencionan que la recaída se cura "quemándose" con algunas plantas, esto es, hirviendo en un recipiente diversas plantas entre las que se mencionan el piciete, ojo de gallo (?), tomate (?) ytlalogoxuchitl (?), a lo cual se agrega sal y nejayote (agua donde se coció el maíz para las tortillas con un alto contenido de cal). Esta preparación muy caliente se dispone sobre el cuerpo, repitiéndose el procedimiento durante cuatro días; al quinto día se da al paciente un baño en el temazcal, pero sin usar hierbas (2) (V. quemada de hierbas).
Dentro del ámbito médico, se reconoce a los entuertos como las contracciones uterinas dolorosas presentes después del parto, generalmente más pronunciadas en las multíparas (5). La presencia de fiebre y escalofríos en la sintomatología referida, nos hace pensar en la posibilidad de un proceso infeccioso adquirido en el transcurso o después del parto.
(1) Mellado Campos, V. et al., 1989.(2) Álvarez Heydenreich, L., 1976.(3) Rangel, R., 1982.(4) Álvarez Heydenreich, L., 1987.(5) Diccionario terminológico de ciencias médicas, 1984.