(DF) (Mor) (1 y 2) (Oax) (3) (Pue) (3 y 4) (Ver) (3). Sinónimo(s): empacho de calor (Pue) (4).
Tipo de empacho cuyo signo distintivo es la ausencia de diarrea.
Es creencia popular que determinados alimentos o sustancias se "pegan" al estómago al ser ingeridos, siendo éste el origen común de los diversos tipos de empacho.
Existe una gran variedad de manifestaciones, claramente reconocidas y diferenciadas en Oaxaca, Puebla y Veracruz, como: dolor y sofocamiento de estómago, falta de apetito, lengua blanca, aliento y eructos fétidos, palidez, ojos hundidos, llanto, estómago inflamado y duro que emite un sonido "hueco" a la percusión, mientras que al tacto se percibe como si se "deslizara agua debajo de la piel"; asimismo, algunos terapeutas afirman que al hacer la palpación, es posible percibir una "bola" en el lado derecho del abdomen (3). En Nahuzontla, Puebla, además de lo anterior, se reporta calentura y dificultad para obrar (4). En Hueyapan, Morelos, se señala que el enfermo "obra seco", igual que ceniza (2). Por último, en el Distrito Federal y Morelos se destacan los malestares de asco, sed y "estómago caliente" (1).
Según la intensidad de los signos se puede distinguir el empacho leve y el empacho fuerte (3). En Puebla, Veracruz y Oaxaca, entre los numerosos tratamientos destacan el uso de infusiones de hierbabuena (Mentha piperita) y mirto (Salvia microphylla), y tres lejías hechas de ceniza, tequezquite y carbonato, que pueden sustituirse por Al-ka-Seltzer. Se utilizan además aceites que facilitan la digestión, como el aceite de comer; lo indicado anteriormente se complementa con maniobras y masajes (3) (V. tronar el empacho). En Nahuzontla, no se acostumbran las maniobras, solamente se administra durante tres días y en ayunas, un té de hojas de laurel (Litsea glaucescens) con manzanilla (Matricaria recutita) y un poco de carbonato, acompañado de una cucharada de aceite de san Sebastián (4). En Hueyapan se ingiere una mezcla de jugo de naranja (Citrus aurantifolia) con carbonato y azúcar (2). Finalmente, en el Distrito Federal y Morelos acostumbran purgar al paciente con aceite de ricino, de oliva o de comer, o bien, con una cucharada de manteca quemada con tequezquite; para quitar el "calor en el estómago", amarran el abdomen con un lienzo sobre el cual disponen hojas frescas de higuerilla (Ricinus communis) o col (Brassica oleracea) "picadas" con una escobeta y untadas con manteca o grasa de pollo acompañada de carbonato (1).
Desde el punto de vista médico, este trastorno digestivo puede corresponder a una dispepsia por fermentación exagerada, debida a la permanencia prolongada de alimentos en la cavidad gástrica, o también, por aumento de la secreción acida (hipercloridria) acompañada de un estado inflamatorio de la pared del estómago (1).
(1) González, L, 1990.(2) Álvarez Heydenreich, L, 1976.(3) Zolla, C. et al., 1988.(4) Zolla, C. et al., 1989.