El me´vinik es una importante causa de demanda de atención de la medicina tradicional tzotzil, tanto por la frecuencia con que aparece entre los habitantes de las comunidades, como por la gravedad de sus consecuencias si el enfermo no recibe oportunamente el tratamiento adecuado. Este padecimiento es conocido por la población únicamente con el nombre en lengua tzotzil de me´vinik, si bien los hablantes de castellano que recogieron la información lo han consignado como "alteración", término que los indígenas del área desconocen como sinónimo de esta enfermedad. Es un padecimiento que afecta de preferencia a las personas adultas, las cuales solicitan para su tratamiento los servicios de los hierberos, principalmente.
En la cosmovisión tzotzil, el término me´vinik designa tanto a un órgano anatómico, que en las personas saludables se encuentra situado detrás del ombligo, como a la enfermedad que surge como consecuencia de cualquier alteración que sufra. Este órgano tiene la propiedad de latir "como corazón", característica que permite detectarlo mediante palpación (V. latido). La causa más común que lleva a una modificación del estado de este órgano, es la realización de esfuerzos físicos excesivos, fenómeno frecuente entre los adultos que ejecutan labores agrícolas. Según los terapeutas, al realizar este esfuerzo, el me´vinik"se sube hacia el pecho", es decir, se desplaza hacia arriba hasta situarse en la parte superior del estómago. Los síntomas más frecuentes que manifiesta el enfermo son: dolor penetrante en la región epigástrica, el cual se intensifica cuando el paciente se fatiga o hace algún movimiento, dificultad para respirar que le produce una sensación de ahogo, y una enorme debilidad que incluso le impide caminar. A veces el mal se presenta acompañado de calentura con escalofríos.
El diagnóstico se establece mediante un interrogatorio, la observación del estado físico del paciente, y la palpación del abdomen -especialmente de la región estomacal- para localizar el latido que indica la presencia del me´vinik.
El tratamiento empleado por los terapeutas tzotziles tiene el propósito de "bajar el me´vinik, porque si no, la persona se muere", afirman los terapeutas. El objetivo se logra administrando al paciente un té preparado con angélica -planta de la que se utiliza cualquiera de sus partes-, según la siguiente receta consignada por los informantes: "se echa un puñado de las partes, revueltas o por sí solas, en un litro de agua, y después se cuela; se deja enfriar el té tapando bien la olla". El preparado se administra frío, en dosis de un vaso tres veces al día; según la gravedad de la enfermedad, el tratamiento puede durar de tres a seis días. Si el dolor de estómago es muy intenso, se recomienda colocar en el área dolorida un emplasto preparado con hojas hervidas de chijilte (sauco). Como complemento del tratamiento, los terapeutas aconsejan seguir una dieta alimenticia durante todo el curso de la terapia, régimen que contempla evitar el consumo de alimentos como la carne, los refrescos, el café, y todas aquellas comidas que contengan chile; se recomienda sobre todo el consumo de verduras, frutas, arroz, frijol, tortillas y bebidas frías; por último, se recomienda no ingerir nada particularmente caliente, además de bañarse sólo con agua templada. Si al término del tratamiento los síntomas no han desaparecido, los terapeutas aconsejan repetir nuevamente la curación.
En caso de que el enfermo que sufre me´vinik no reciba el tratamiento oportunamente, los síntomas de la enfermedad se intensifican y el paciente muere. A manera de prevención, la población suele recitar oraciones, en las que pide protección a los santos, ya sea frente al altar de la vivienda o en la iglesia de la localidad.