Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana
Universidad Nacional Autónoma de México
Atlas de las Plantas de la Medicina Tradicional Mexicana
Guapinol
Hymenaea courbaril L. — Leguminosae


La imagen fué proporcionada por:
Jaime Raúl Bonilla Barbosa
CONABIO
Sinonimia popular.

Coapinole, guapirol, huapinol, palo de cuapinol, tamarindo. Oaxaca: ak pejk (mixe), tzon te noan (amuzgo).

Botánica y ecología.

Árbol de 30m de altura, con las ramas extendidas. Tiene la corteza de color café grisáceo, las hojas se encuentran en grupos de 2, son de color verde amarillento a verde oscuro en ambas caras. Las flores son blancas; tienen un aroma perfumado y están en las partes terminales de las ramas. Los frutos son vainas ligeramente aplanadas, de color verde a café oscuro; miden de 10 a 18cm de largo.

Originaria de América tropical. Habita en climas cálido y semicálido entre los 290 y los 1300msnm. Planta silvestre, cultivada en huertos familiares, asociada a vegetación perturbada de bosques tropicales caducifolio, subcaducifolio y subperennifolio.

Etnobotánica y antropología.

El principal uso medicinal que se le da al guapinol, es contra la tos (Tabasco, Oaxaca, Guerrero), además de otros trastornos respiratorios como gripe y asma.

También es utilizada en desórdenes de tipo digestivo como disentería, diarrea y úlcera.

En padecimientos renales, cuando hay inflamación de los riñones, se prepara un cocimiento de esta planta junto con oreja de lobo (Clusia sp.), bramilla, bejuco de tres costillas, ruda (spp. n/r), guarumbo (Cecropia obtusifolia), cabello de elote (Zea mays), bejuco guaco (Aristolochia sp), anono (Annona reticulata), y cola de caballo (Equisetum myriochaetum); se toma como agua de uso (Guerrero).

Por otra parte, se aplica en granos y se emplea contra el espanto.

En Oaxaca, los amuzgos emplean la resina o trementina de la corteza de este árbol para limpiar el "espanto", en lugar del copal. Antes de la curación se extrae la resina de la corteza y se pone a secar al sol. Ya seca se forman bolitas, se ponen alrededor de un huevo, que también se ocupa para limpiar al enfermo de "espanto", y después se quema hasta que reviente, pues la fuerza con que truene, definirá al curandero el tratamiento a seguir.

Historia.

En el siglo XVI, Nicolás Monardes refiere: es usado principalmente para males de cabeza y dolor de ella causada de humores o causas frías, para catarros que de ella procedan después de evacuación, sahumado con ello en tiempo de invierno y do hay enfermedades largas, porque purifica y corrige el aire. En emplastos y en encerados do es menester confortar y resolver en especial humores fríos o ventosidades. Es caliente en el segundo grado, húmedo en el primero.

A principios del siglo XVIII, Juan de Esteyneffer utiliza la resina contra "tullimientos". A finales del mismo siglo, Vicente Cervantes refiere: "es de virtud nervina y vulneraria".

En el siglo XIX, la Sociedad Mexicana de Historia Natural la reporta como antiparasitario.

Para el siglo XX, el Instituto Médico Nacional la reporta como: antiparasitario, para el asma, y catártico. Posteriormente, Maximino Martínez señala los siguientes usos: anticatarral, antirreumático, antiséptico intestinal, asma, astringente, contra enfermedades venéreas y sedante de la circulación. Finalmente, la Sociedad Farmacéutica de México la cita como antiparasitario.

Química.

Las hojas y corteza del tronco contienen una resina y taninos. El compuesto principal de la resina del tronco es el diterpeno ácido labd-13-en-8-ol. Y los principales componenentes de la resina de las hojas son los diterpenos cariofileno y alfa y beta-selineno.

De las hojas y el tallo se han aislado el flavonoide astilibín y el beta-sitosterol.

En la hoja y el aceite esencial del tallo se han detectado los sesquiterpenos beta-bourbone, cariofileno, ciclossativeno, humuleno, alpha-mururoleno, el monoterpeno delta cadineno.

También en las hojas se ha indicado la presencia de un monoterpeno el delta cadineno, además de los sesquiterpenos gamma-cadineno, cariofileno, alfa y beta copaeno, alfa y beta humuleno, alfa y beta selineno.

Farmacología.

Se ha demostrado que las hojas presentan una actividad antitumoral probada en ratones con carcinoma de pulmón de Lewis.

Se ha demostrado la actividad antibacteriana de un extracto etanólico obtenido del tallo de la planta, y evaluado frente a Bacillus subtilis, Escherichia coli, Pseudomonas aeruginosa y Staphylococcus aureus. Sin embargo, el extracto etanólico obtenido de la resina de la planta no presentó actividad frente a las mismas especies de bacterias. La evaluación de un extracto etanólico obtenido del tallo de la planta, no proporcionó actividad antibiótica frente a la levadura Candida albicans.

Una decocción de tallo presentó actividad diurética al evaluarse en ratas por la vía nasogástrica.

Principios activos.

Se describe en la literatura que los taninos son responsables de la actividad antitumoral de esta planta.

Comentarios.

Planta originaria de América de uso muy antiguo y de la cual se ha demostrado experimentalmente una actividad antibiótica, que confirma la efectividad de la planta en algunas aplicaciones terapéuticas.

Herbarios.

CIB, CIESASO, CIIDRIO, IBFFA, IMSSM, MEXU, UAG, UAN.

Literatura.

Botánica. Alejandre V. y cols. 1988; Antonio N. 1989; García S. 1984; Gispert M. y cols. 1991; Herrera N. 1986; Tapia F. 1985.

Ecología. Antonio N. 1989; Gispert M. y cols. 1992; Herrera N. 1986.

Etnobotánica. Alejandre V. y cols. 1988; Antonio N. 1989; García S. 1984; Gispert M. y cols. 1991; Herrera N. 1986; Ortíz G. 1987; Ortíz G. 1990; Tapia F. 1985.

Antropología. Tapia García, F. 1978.

Historia. Cervantes, V. 1889 (1790); Esteyneffer, J. De 1978 (1712); Instituto Médico Nacional. Vol. V 1902. Vol. VI1903; Martínez, M. 1969 (1934); Monardes, N. 1992 (1565-1574); Sociedad Farmacéutica de México. 1952; Sociedad Mexicana de Historia Natural. Segunda Serie Vol. II 1897.

Química. Cunningham A., y cols. 1974.; Chopra R. N., y cols. 1958; Khoo S. y cols. 1973; López J. y Schiff P. L. 1976; Martin S. y cols. 1972; Marsaioli A. y cols. 1975; Stubblebine W. y cols. 1975.

Farmacología. Arrhenius S. y Langenheim J. 1983; Barros G. y cols. 1970; Cáceres A. y cols. 1987; Happich M. I., y cols. 1954. Gira! F. y cols. 1978; Jostt y cols. 1989; Rouquaysol M. y cols. 1980; Verpourte R. y Dihal P. 1987.

Principios activos. Hartwell J. L., Abbott B. J. 1969.