Caída de matriz

La caída de matriz es un padecimiento ginecoobstétrico que se produce en mujeres multíparas, sobre todo si después del parto no se fajan debidamente, y realizan trabajos que requieren un gran esfuerzo físico como, por ejemplo, alzar objetos pesados. Según las parteras choles, este tipo de trabajos produce un enfriamiento del vientre de la enferma, a raíz del cual "algo se desata del cuello de la matriz; el cuello de la misma se estira como nuca de pollo" y baja hasta los bordes de la vagina. La mujer advierte que ha sufrido una caída de matriz por el dolor que siente en el bajo vientre y por la salida, a través de la vagina, de una especie de líquido blanco.

El tratamiento empleado por las parteras choles tiene la finalidad de calentar el vientre de la enferma y llevar nuevamente el órgano caído a su posición original. Con este fin acostumbran "tallar", es decir, sobar el vientre de la enferma con un poco de aceite tibio, el cual también introducen al interior de la vagina. A continuación la terapeuta prepara un baño con plantas medicinales de calidad "caliente"; para ello hierve hojas de tigre, hierba martín, chant´ y hojas de poleo, y con el líquido talla el vientre de la mujer, con movimientos dirigidos hacia arriba, al mismo tiempo que le lava el abdomen y la zona vaginal. Después moja un trozo de algodón con una mezcla caliente de aceite de alcanfor y Vick vaporub, y lo introduce lentamente por la vagina con el propósito de empujar la matriz hasta que alcance su posición original; después le coloca una faja bien ceñida "para que le apriete otra vez la matriz" y le recomienda absoluto reposo durante algunos días, pasados los cuales puede levantarse y comenzar a realizar labores livianas. Para finalizar el tratamiento la especialista prescribe a la enferma la ingestión de un té elaborado con manzanilla, "hojas de aire", hojas de xolomitl y planta amarga, con el propósito de que siga "entrando en calor".