Torcedura o falseadura del tobillo

Constituye otra de las enfermedades frecuentes de la población purépecha. Se produce como consecuencia "de una mala pisada, por saltar o jugar", debido a lo cual uno de los huesos del tobillo se sale de su lugar, tanto que, según lo expresado por los terapeutas, "se ve el hueso en otro lado". Los síntomas que presenta el paciente son: un fuerte dolor e hinchazón en la región del tobillo que le impiden caminar, así como la evidencia visual del hueso fuera de lugar. Todos estos síntomas permiten hacer un diagnóstico presuntivo, el cual se corrobora después de realizar una revisión del área dañada.

Existen diversas terapias para la curación de esta afección; la más común consiste en la aplicación del procedimiento denominado "sobada", que se hace con la ayuda de una pomada preparada con plantas medicinales, en forma suave pero firme, con el fin de acomodar nuevamente el tobillo. Para ello, el terapeuta "primero aprieta con la mano los dedos de los pies y con esto se calma el dolor; luego le amarra el tobillo con un pañuelo y le jala los dedos, uno a uno, para que truenen; después empieza a masajear y aplica la pomada de hierba de pájaro, deja reposar y por último le da otra sobada más suave" (V. verbena y chía).

Las mujeres jóvenes, según los informantes, son las más afectadas por la torcedura del tobillo.