La imagen fué proporcionada por: Atlas de las Plantas de la Medicina Tradicional Mexicana |
Ajo macho. Guerrero: Cúcuta; Oaxaca: ma´+ ajo; Puebla: axux (totonaco); Veracruz: axox; San Luis Potosí: axux (tenek).
Planta herbácea, con unos bulbos enterrados que están formados de dientes de sabor picoso. Tiene las hojas alargadas con apariencia de cintas. Sus flores están en unas cabecitas blancas con lila en la punta de untallo largo delgado, y tienen una hoja que cuelga.
Originaria del oeste de Asia, Europa y del Mediterráneo. Habita en climas cálido, semicálido y templado desde el nivel del mar hasta los 2600m. Planta cultivada con fin comercial o en huertos para consumo familiar, adaptada a diferentes condiciones ecológicas, con vegetación circundante de bosque tropical caducifolio, subcaducifolio, subperennifolio y perennifolio, matorral xerófilo, bosque mesófilo de montaña y mixto de pino-encino.
Dentro de la concepción popular el ajo tiene propiedades mágicas que ayudan a diagnosticar y curar enfermedades tradicionales.
El uso medicinal que más se menciona para esta planta es para combatir los parásitos intestinales, oxiuros, tricocéfalos, tenia (V. lombrices y solitaria) y principalmente amibas. Se utiliza el bulbo crudo por vía oral, en ayunas, o bien, mezclado con semillas de papaya (Carica papaya). Se emplea además en trastornos digestivos como dolor de estómago, gases intestinales y estreñimiento.
Para el tratamiento de reumatismo, se come el bulbo crudo o se aplica por frotación, reposado en alcohol, mezclado con tabaco (Nicotiana tabacum) y marihuana (Cannabis sativa var. indica), o bien, por vía oral, junto con tabaco, ruda (Ruta chalepensis) y Santa María (Tanacetum parthenium). Se deja reposar por dos días
Para problemas de la piel como sabañones, mezquinos, roña, sarna, tiña y granos, el bulbo o tallo se machaca y se aplica como cataplasma. También se utiliza en picadura de araña, picadura de hormiga o picadura de alacrán.
Los ajos cortados el primer viernes de marzo, protegen de las picaduras de los animales ponzoñosos.
Se usa también en enfermedades respiratorias como tos, anginas, asma, garganta irritada, ronquera y bronquitis y para dolores en general, como los de espalda, cabeza, musculares y dolor de oído; para esto último se usa en forma local.
En padecimientos culturales como "mal aire y mal de ojo" se emplea el bulbo de manera externa.
Entre los yaquis de Sonora y tarahumaras de Sojahuachi, se utiliza el ajo aplicado por vía rectal para diagnosticar si el paciente está asustado (padece susto). Después de frotar el tronco del cuerpo del enfermo con una decocción de marrubio (Marrubium vulgare), se le coloca un diente de ajo en el recto, si el ajo penetra significa que el paciente está asustado, si es rechazado, es otra enfermedad, pero no "susto".
Para la caída de mollera, una vez que la curandera realiza la terapia apropiada, indica que para lograr la curación es necesario efectuar una serie de rituales en la casa del enfermo, a diferentes horarios. Por la noche se tienen que poner en agua caliente diez dientes de ajo molidos, mezclados con mostaza y colocarlos en una palangana depositada a los pies de la cama. Después se baña al enfermo untándole y frotándole la cabeza con esta mezcla y finalmente se le manda a dormir.
En la curación del "mal de ojo" se utiliza el ajo barriendo o sobando al enfermo para extraerle el mal.
Los ajos colocados sobre la puerta de la casa impiden la entrada de malas influencias, son remedio eficaz contra cualquier brujería y además atraen la buena suerte. Es costumbre ponerlas en el lugar donde se guarda el dinero: monedero, cajón o cartera.
Se le atribuyen propiedades abortivas y se utiliza para acelerar el parto. Controla la fiebre (V. calentura), la presión arterial alta y el corazón. También se emplea para casos de alferecía, várices, fatiga, nervios, insomnio, anemia, mal de orín, caries e infección del oído.
Calidad de la planta: cordial.
En el siglo XVII, Gregorio López refiere que es "útil para mordedura de víbora y de perro rabioso, clarifica la voz, mata liendres y piojos, sana cardenales de ojos, restituye cabellos que derribó la tiña, sana postillas y bejigas que salen por el cuerpo, extermina alvarazos, llagas, manancías que se hacen en la cabeza, caspa y sarna. Relaja dolor de dientes, provoca menstruación y pares. Provoca orina, desopila poros, útil a hidropesía, mata los gusanos que tiene el oído y ayuda a quitar la cuartana.
A inicios del siglo XVIII, Juan de Esteyneffer recomienda el ajo para el dolor de cabeza, de muelas, contra los pujos, la hidropesía y la inapetencia. Vicente Cervantes, a finales del mismo siglo, lo considera acre, diurético, madurativo, diaforético, flatulento, afrodisiaco y antihelmíntico, y que, se usa también para matar la tenia.
En el siglo XX, Maximino Martínez indica que se usa como antidisentérico, antiescabiótico, antifímico, antipalúdico, antiparasitario, antipirético, antirrábico, antiarterioesclerótico, broncodilatador, cáustico, diurético, estimulante, hipotensor y rubefaciente, que purifica la sangre, cura la tiña y para piquete por artrópodo. Luís Cabrera lo señala como antiséptico intestinal, catártico y diurético, para curar bronquitis y callos. Finalmente, la Sociedad Farmacéutica de México registra su uso como antifímico, antitusígeno, eupéptico, rubefaciente y para curar la bronquitis.
Del bulbo de Allium sativum se obtiene un aceite esencial rico en componentes azufrados entre los que se han identificado ajoeno, alicina, aliína, s-alilcisteína, alilmercaptano, alilmetildisulfuru, alilmetiltrisulfuro, dialilsulfuro, dialildisulfuro.
Se ha demostrado la actividad antibiótica de los extractos acuoso, etanólico e hidroalcohólico del bulbo sobre las bacterias Bacillus subtilis, Escherichia coli, Staphylococcus aureus, Pseudomona aeruginosa, el hongo Candida albicans y los dermatofitos Aspergillus nidulans, Cladosporium carrionii, Epidermophyton fluccosum, Trichophyton mentagrophytes y T. rubrum.
La actividad anticlastogénica del extracto crudo de Allium sativum fue probado en ratones a los que se administró extracto (100, 50 y 25mg/kg diarios) en la dieta durante 6 días, al final de los cuales se administraron los clastógenos mitomicina y ciclofosfamida o arsenita del sodio al mismo tiempo que el extracto.
La clastogenicidad de los tres mutágenos se redujo significativamente en los animales a los que se les dio extracto de A. sativum en la dieta.
Se encontró que Allium sativum inhibió la mutagenicidad causada por mitomicina C, bleomicina, fluorouracil, cisdia-minodicloroplatino, arabinosiloitosina y mustargen usando la prueba de rastreo de inducción de SOS.
Los resultados de dos estudios epidemiológicos realizados en Italia y China sugieren una disminución en el riesgo de cáncer de estómago cuando se incrementa el consumo de ajo y otras especies relacionadas de Allium.
Se ha demostrado en la rata que el aceite esencial presenta un efecto hipotensor y vasodilatador sobre los vasos periféricos.
Mediante estudios clínicos se ha demostrado que la ingestión de aproximadamente la mitad de un diente de ajo por día por pacientes hipercolesterolémicos de entre 50 y 70 años, reduce los niveles de colesterol sanguíneo en aproximadamente un 9%.
También se ha observado que una dieta rica en el aceite esencial durante varios días disminuye la agregación plaquetaria en el hombre.
En un experimento con conejos diabéticos (inducidos con aloxana) una de las substancias que indujo hipoglucemia fue la alicina (óxido de dialil-disulfuro).
Los dialil-tioéteres del A. sativum inhiben la genotoxocidad del benzopireno en ratones, se inhibieron la formación de nitrosaminas carcínogénicas bajo diferentes condiciones.
Se observó una baja actividad irritante del extracto hidroalcohólico del bulbo en conejos.
Allium sativum es una planta introducida de uso muy antiguo. Se han confirmado experimentalmente las actividades antibiótica, antidermatofitos, hipoglicémica e hipocolesterolémica que validan varias de sus aplicaciones terapéuticas tradicionales.
CHAPA, CIB, CIQRO, EBUM, ENCB, FCME, FMVZ, HUAT, IBFFA, IMSSM, IZTA, MEXU, PROCOMITH, UAS, UC.
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